lunes, 21 de diciembre de 2009

Y si no hiciera falta
NADA

Si,
lo se,
parece una idea estúpida.
Y quizá
nunca te hubiera encontrado
si no tuviera NADA.

Pero,
una vez rota
la sucia capa de pretensiones
que invade
todo tipo
de presentaciones,
sentados
en un rincón
de esta ciudad tan enorme,
sin NADA,
ni nadie
que nos estorbe,
hablando de los sobrepesos
que nos hacen ser mas torpes,
sin darnos cuenta,
sin la cargante necesidad
de pensarlo...

...olvidamos todo,
no nos hace falta
NADA

miércoles, 16 de diciembre de 2009

SI SUPIERAS LO IMPORTANTE

Algo temes,
ocultas tu mirada
entre los amasijos de la evolución,
y atrincherándote
en una mentira,
ni de reojo proyectas calor.
Te entregas a imágenes
de ornamentos ficticios,
por pánico a la vulgaridad,
densa colección de prejuicios
para quien regala honestidad.

Si supieras lo importante,
lo sutil,
lo clandestino,
lo que no se vende
en esa red
que enmaraña tu cintura...

...no te olvidaría nunca.

miércoles, 9 de diciembre de 2009

La palabra,
ese es el problema,
traspasa las barreras de la razón.
La misera palabra,
que califica al cretino
en los fértiles campos de la interpretación.

La mirada,
el único argumento.
Confundidos los colores en la transparencia,
es infinito el panel
de únicas versiones
que irrita los ojos de la paciencia.

La apariencia
no es sincera,
guia los pensamientos hacia la estética,
y en ella
se recrean nuestros juicios,
que sentencian la muerte poética.

Olvidadas las paginas de la percepción,
separamos la palabra de la necedad,
sometemos nuestra mente a la simpleza
de admitir mas de una verdad.

sábado, 5 de diciembre de 2009

Mueren la visiones,
mueren las palabras,
muere la eterna colección de sentidos
en la opaca decisión del tiempo.
Pero algo quedara en este proceso vital,
algo debe permanecer,
tras tantos instantes de intimidad,
algo que sacie con plenitud
la duda de mi existencia.
Un infinito calor
que alivie mis malos pensamientos,
una conversación en los confines del mundo,
una imagen,
una presencia dueña de mi alma
que guíe mis pasos
hacia la absoluta compañía,
o simplemente,
alguien como tu.